El Cuidado de la Barba

Por Dr. Carlos Rosales

En las últimas décadas se ha puesto muy de moda el cuidado masculino, desde la década de los 90’s se ha venido popularizando la metro-sexualidad, mostrando un hombre impecable en su atuendo, cuerpo delgado y definido, rostro cuidado; un hombre que hace uso de productos para la piel y cabello especiales para hombre y lo admite públicamente. El hombre metrosexual se pone aún más de moda por los futbolistas famosos de los años noventa.

El hombre actual quiere lucir masculino pero cuidado, resaltando sus rasgos masculinos como la barba. Aparecen entonces varios términos novedosos, uno es ubersexual, que se deriva de la palabra alemana “Über”, que significa por encima, es decir, por encima de la sexualidad y nos hace recordar al “súper hombre” (übermensch) de Nietzsche, como el macho líder de la manada.

La ubersexualidad nos muestra un hombre masculino, pero meticulosamente bien cuidado no al extremo del metrosexual, pero si una imagen cuidada. Otra tendencia nueva es conocida con el término lumbersexual, es decir, aquellos hombres que inspirados en los “lumberjacks” o leñadores, usan una barba larga, pelo en el pecho, camisas a cuadros, botas, todas las características de un leñador, sin necesidad de serlo. Estos hombres buscan verse muy masculinos con una apariencia ruda, pero su apariencia se diferencia en que lleva cierto cuidado.

Actualmente en muchos países del mundo se vuelven a poner de moda las barberías, donde van los hombres para el cuidado de la barba, pues ya sean largas o cortas, las barbas siempre deben estar limpias, cuidadas, acondicionadas y peinadas. Una barba mal cuidada puede contener miles de bacterias y puede ser una fuente de contaminación. Para tener una barba ideal, debes poseer suficiente cantidad de vello facial para evitar que se vean escasas o disparejas. Es recomendable dejarla crecer por lo menos de 2 a 3 meses sin recortarla para que tome forma. En ese momento es importante tratar de recortarla en un lugar especializado, por lo menos las primeras veces, para que se le dé una forma adecuada, pues hacerlo por sí mismo no le es tan sencillo.

Es muy importante lavar todo el rostro de día y de noche y enfatizar el área de la piel bajo la barba. Es recomendable realizar una exfoliación una vez a la semana y utilizar productos especiales para barba, como acondicionadores y pastas de peinar. La barba debe lucir lo más impecable posible, para que llame la atención de una forma agradable. Después de comer debe ser cepillada, y de ser necesario, lavada, para que no se vuelva un foco infeccioso. Como en todo lo demás es esencial tratar de no tocarse mucho la barba para no trasmitir las bacterias que se encuentran en las manos al rostro.

Llevar una barba que luzca cuidada y no desarreglada requiere tiempo y esfuerzo, y es importante para el aseo personal asegurarse que se vea limpia en todo momento. Es mejor no llevar barba, si esta no está bien cuidada.